¡Feliz día del Orgullo!
No voy a ser de esas personas que hablan de lo que no saben o defienden causas sin argumentos y bases. Yo sólo respeto al individuo como a mí misma y acepto la diversidad de gustos, orientaciones, sentimientos e identificación del ser de cada quien.
El Día Internacional del Orgullo LGTBIQA+, yo lo conocía antes como el día del orgullo Gay que casualmente se celebra el 28 de junio, en mi cumpleaños, al igual que el día del teatro. En conmemoración a esto les contaré una historia linda que habita en mi corazón porque, aunque soy heterosexual, siento un profundo amor sincero por un hombre que no lo es y por eso y por todos mis seres queridos orgullosos de su sexualidad, me atrevo a hablar de mi relación con él.
EL INICIO DE TODO
La primera semana de julio del 2016, estaba yo nerviosa comenzando a bailar en el curso de Salsa Casino que estaban dictando a siete casas de mi casa en el parcelamiento, una academia nueva que había nacido llamada Zandunga. Ya el curso había avanzado un poco, iban por básico 2, ya habían pasado el ajedrez y el otro ya había llegado al básico 3, donde bailaba mi hermana. Me dejaron bailar con ellos porque unos años antes había hecho el 1er básico con uno de los instructores de la nueva academia. Amé bailar, fue hacer realidad un sueño que tenía desde niña y eso me llenó el espíritu. Así que entregada iba a diario a bailar allí y a ser feliz. Entonces, un día de mi primera semana llegó un chico delgado, cabello rubio oscuro, ojos de ese color marrón que podrían ser miel pero quedaron en caramelo, y una gran sonrisa en su rostro. Torpe al bailar, elocuente y con ganas de estar allí y pasarla bien, al igual que yo.
Enseguida se presentó y yo me reí de sus ocurrencias; pasados los días me fui haciendo parte del grupo con facilidad y nos tocó organizar un social (reunión de casineros de diferentes agrupaciones que se ofrecían todas las semanas en cualquier espacio apto para la exhibición de baile de los integrantes de cada academia de la ciudad), en esta ocasión el social le correspondía a mi academia y como mi casa estaba disponible, mi hermana y yo la ofrecimos para el evento. Jhonny fue de los primeros en llegar, como todo él, se acercó saludó a todos y comenzó a inventar qué beber, qué hacer. Esa noche se fue la luz (nada raro en mi ciudad) y esperamos un rato antes de poder bailar. Comenzamos los tragos y hablamos de todo, cuando se encendió la música fue el primero en bailar conmigo, y el último también. Fue una noche increíble. Pasaron los días, salimos, compartimos, bailamos, nos hicimos novios, fue como si nos conociéramos de toda la vida o de otra vida, quizá.
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Al cabo de unas semanas se incorporó al grupo un chico alto fuerte, de buen cabello, que según me enteré, estaba en un viaje por la Gran Sabana mientras mi relación se desarrollaba y al él regresar las cosas comenzaron a complicarse. Resultó ser que era su novio también... Sí, el novio de mi novio. La verdad es que este tipo de situaciones no me sorprendían, mi círculo de amigos gay era bastante amplio y mi ojo clínico par que me gustara alguno era sin dudas especial, por alguna razón me sucedió varias veces que me llamaba la atención o me encaprichaba con algún chico nuevo y este resultaba estar interesado en algún amigo mío o algún caso similar. Esa vez no fue la excepción.
Al principio no fue muy clara la situación; Jhon me dio alguna excusa para romper conmigo lo que a mí me dolió como si hubiese sido una relación eterna, y en realidad habían pasado algunas semanas, no más. Luego comenzó a llegar a la academia con él y a evitarme. Escuché comentarios extraños, burlas y estuve a punto de rendirme y largarme hasta que él me llamó una noche. Me dijo que necesitaba hablar con alguien y que quería disculparse. Entonces fue sincero conmigo y me dijo toda la verdad, los matices de su relación y de su orientación. Me juró que no quiso lastimarme y que no fui una pantalla o un clóset, sino que él no era completamente gay y que conmigo las cosas eran diferentes. Se desahogó conmigo y nos descubrimos de una forma diferente y esa noche volvimos a ser nosotros, ya no éramos novios, por supuesto, pero comenzamos a ser uno, y han pasado años y aún lo somos.
NUESTRO INTERMEDIO
Con el pasar de los días y los meses, Jhonny y yo nos hicimos íntimos, fue inevitable. Su relación terminó, mis intentos de otras relaciones fallaron; siempre nos teníamos el uno al otro. Mientras yo planificaba mi migración, él me acompañaba en mi espera de cambios, y éramos nosotros los que íbamos cambiando. Compartimos en familia, nos acompañamos en momentos duros, hicimos viajes, estuvimos juntos, construimos muchos recuerdos ese año, y éramos nuestra excusa perfecta. Para mi familia y algunos amigos él era mi "amigo gay" y para su familia a quien él aún no le había sido sincero, yo era su "amor". Conocí a cada uno de sus cuadres, de sus gustos, todos buscando mi aprobación y yo sólo callaba, sonreía y asentía. Pasó el tiempo y me acostumbré a aquello así como él se acostumbró a mi paseo de hombres pre-emigrar, hasta que llegó mi hora de partida y llegamos a pensar que las cosas tenían que cambiar. Una noche antes de mi viaje, él me prometió llegar a donde yo estuviese y dejar toda su diversidad por un futuro conmigo. Yo le dije que le iba a querer siempre.
Fotografía tomada por Alejandro R. Venegas, @alejelinson en sus R.S
EL DESENLACE
Cuando tenía dos meses en Lima-Perú, y una nueva relación que le había ocultado, él me dijo que en un par de semanas emprendería su viaje a donde yo estaba establecida. Y así lo hizo, pero ya mis circunstancias eran diferentes. Yo estaba "embobada" por un chico con el que vivía en mi residencia, entonces me tocó sincerarme a mí con él. Le dije entonces que le seguía queriendo pero no del mismo modo. No les voy a negar que lo intentamos, lo hablamos y analizamos mil veces pero era mayor mi miedo a sus gustos extravagantes, y su miedo a mí falta de compromiso que lo que podíamos lograr juntos en relación de pareja. Fue un golpe bajo para ambos que nos costó un tiempo asimilarlo. Sin embargo, al cabo de unos meses, ya habíamos encontrado una nueva normalidad. Incluso él había conocido a una chica que le había gustado, luego a un chico, y así... Yo conocí a Leal y fue a él la primera persona a la que le conté que me gustaba, incluso estuvo presente en mi primera cita, tiempo después. Un par de meses luego, me tocó llamarle para decirle que estaba embarazada, lo que a él quizá no le hizo mucha gracia. (Algo así como que: yo no quería tener hijos con él, ni con nadie y salí embarazada de "un extraño"). Al final terminó mimándome durante mi embarazo,
se dispuso a fraternizar con Leal, incluso a convivir con él la temporada que vivió en mi sala y Leal al tanto de todo, lo aceptó como parte de mi vida.
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POSTDATA
Cuando Leal y yo decidimos venirnos a La Argentina por el bien de la familia que estábamos formando, él prometió venir a vernos y han pasado ya tres años que no nos vemos pero ha estado presente en mi vida como desde el primer día. Aún guardo mis esperanzas de volver a verle y volver a compartir nuestro cariño. Porque si algo aprendimos en estos años es que nos amamos, pero no como hombre y mujer, eso ya lo dejamos atrás hace mucho tiempo. Nos amamos como lo que somos, grandes amigos, un gran amor bonito, sano y sin reservas.
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Para esta publicación bastante personal, tengo autorización de la parte involucrada quien hoy también celebra orgulloso su orientación y su felicidad. Y espera con ansias el resultado final de este relato.
Happy Pride Day!
I will not be one of those people who talk about what they do not know or defend causes without arguments and bases. I only respect the individual as myself and accept the diversity of tastes, orientations, feelings and identification of each person's being.
The International LGTBIQA+ Pride Day, I used to know it as Gay Pride Day, which coincidentally is celebrated on June 28, on my birthday, as well as the day of the theater. In commemoration of this I will tell you a cute story that dwells in my heart because, although I am straight, I feel a deep sincere love for a man who is not and for that reason and for all my loved ones proud of their sexuality, I dare to talk about my relationship with him.
THE BEGINNING OF EVERYTHING
The first week of July 2016, I was nervous starting to dance in the Salsa Casino course that they were dictating seven houses away from my house in the subdivision, a new academy that had been born called Zandunga. The course had already advanced a little, they were in basic 2, they had already passed chess and the other had already reached basic 3, where my sister danced. They let me dance with them because a few years before I had done the 1st basic with one of the instructors of the new academy. I loved dancing, it was a dream I had since I was a child and that filled my spirit. So I went there every day to dance and to be happy. Then, one day in my first week, a thin boy arrived, dark blond hair, brown eyes that could be honey but were caramel, and a big smile on his face. Awkward at dancing, articulate and eager to be there and have a good time, just like me.
Immediately he introduced himself and I laughed at his witticisms; after a few days I became part of the group with ease and we had to organize a social (meeting of casineros of different groups that were offered every week in any space suitable for the exhibition of dance of the members of each academy in the city), this time the social corresponded to my academy and as my house was available, my sister and I offered it for the event. Jhonny was one of the first to arrive, like all of him, he approached, greeted everyone and began to invent what to drink, what to do. That night the power went out (nothing unusual in my city) and we waited a while before we could dance. We started the drinks and talked about everything, when the music came on he was the first one to dance with me, and the last one too. It was an incredible night. Days went by, we went out, we shared, we danced, we became boyfriend and girlfriend, it was as if we had known each other all our lives or from another life, maybe.
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After a few weeks a tall strong guy with good hair joined the group, who I found out was on a trip to the Gran Sabana while my relationship was developing and when he returned things started to get complicated. It turned out that he was her boyfriend too? Yes, my boyfriend's boyfriend. The truth is that this kind of situations did not surprise me, my circle of gay friends was quite wide and my clinical eye for someone to like me was undoubtedly special, for some reason it happened to me several times that I was attracted or infatuated with some new guy and he turned out to be interested in a friend of mine or some similar case. This time was no exception.
At first the situation was not very clear; Jhon gave me some excuse to break up with me which hurt me as if it had been an eternal relationship, and in reality it had been a few weeks, no more. Then he started coming to the academy with him and avoiding me. I heard strange comments, teasing and was about to give up and walk away until he called me one night. He told me he needed to talk to someone and wanted to apologize. Then he was honest with me and told me the whole truth, the nuances of his relationship and his orientation. He swore to me that he didn't mean to hurt me and that I wasn't a screen or a closet, but that he wasn't completely gay and that with me things were different. He unburdened himself to me and we discovered each other in a different way and that night we were us again, no longer boyfriend and girlfriend, of course, but we began to be one, and it's been years and we still are.
OUR INTERMEDIARY
As the days and months passed, Jhonny and I became close, it was inevitable. His relationship ended, my attempts at other relationships failed; we always had each other. While I was planning my migration, he accompanied me in my wait for change, and we were the ones who were changing. We shared as a family, we accompanied each other through hard times, we took trips, we were together, we made a lot of memories that year, and we were our perfect excuse. To my family and some friends he was my "gay friend" and to his family to whom he had not yet been honest, I was his "love". I got to know every one of his blocks, his tastes, all seeking my approval and I just kept quiet, smiled and nodded. Time went by and I got used to it just as he got used to my pre-emigration man-walking, until it was time for me to leave and we came to think that things had to change. One night before my trip, he promised to come to where I was and leave all his diversity for a future with me. I told him that I would love him forever.
Photograph taken by Alejandro R. Venegas, @alejelinson on his R.S.
THE DENOUEMENT
When I had two months in Lima-Peru, and a new relationship that I had hidden from him, he told me that in a couple of weeks he would start his trip to where I was settled. And so he did, but my circumstances were different. I was "enraptured" by a guy I was living with in my residence, so it was my turn to come clean with him. I told him that I still loved him but not in the same way. I will not deny that we tried, we talked about it and analyzed it a thousand times but my fear of his extravagant tastes and his fear of my lack of commitment was greater than what we could achieve together as a couple. It was a low blow for both of us and it took us a while to assimilate it. However, after a few months, we had found a new normal. He had even met a girl he liked, then a boy, and so on.... I met Leal and he was the first person I told that I liked him, he was even present on my first date, some time later. A couple of months later, I had to call him to tell him I was pregnant, which he probably didn't like very much (something like: I didn't want to have children with him, or with anyone else, and I got pregnant by "a stranger"). In the end he ended up spoiling me during my pregnancy,
He was willing to fraternize with Leal, even to live with him during the time he lived in my living room and Leal, aware of everything, accepted him as part of my life.
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POSTDATA
When Leal and I decided to come to La Argentina for the sake of the family we were forming, he promised to come and see us and it has been three years since we have seen each other but he has been present in my life as from the first day. I still keep my hopes of seeing him again and sharing our affection. Because if we learned anything in these years is that we love each other, but not as man and woman, we left that behind a long time ago. We love each other as what we are, great friends, a great, beautiful, healthy and unreserved love.
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For this rather personal publication, I have authorization from the party involved who today also proudly celebrates his orientation and his happiness. And looks forward to the final outcome of this story.
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