"Lo marqué un poco con la cabeza y un poco con la mano de Dios." – Diego Armando Maradona al ser cuestionado por el gol que abrió el marcador ante Inglaterra en la Copa del Mundo de México ’86.
"I scored it a little with my head and a little with the hand of God." - Diego Armando Maradona when questioned about the goal which opened the score against England at the Mexico '86 World Cup.
El Estadio Azteca, al Sur de la siempre caótica Ciudad de México, un orbe tan indómito como irrefrenable, era el marco perfecto para aquel partido que reeditaba -con tintes mucho menos beligerantes- un capítulo histórico, una rencilla añeja, la Guerra de las Malvinas. Aquel Coloso de la Colonia Santa Úrsula, Coapa, asentado en la Delegación Coyoacán era ya uno de los Templos Sagrados del Balompié, y en aquella tarde en que ingleses y argentinos chocaban por los cuartos de final de una Copa del Mundo se escribiría uno de sus capítulos más sagrados.
En juego un boleto a las Semifinales del Mundial de 1986 y la tensión adicional que genera cualquier conflicto geopolítico; las Malvinas aderezaban el ambiente en el Estadio Azteca aquel 22 de junio de 1986.
The Azteca Stadium, in the south of the always chaotic Mexico City, an orb as indomitable as it is irrepressible, was the perfect setting for that match that replayed -with much fewer belligerent overtones- a historic chapter, a long-standing grudge, the Falklands War. That colossus in the Santa Ursula neighbourhood, Coapa, located in the Coyoacan Delegation, was already one of the Sacred Temples of football, and on that afternoon when England and Argentina clashed in the quarter-finals of the World Cup, one of its most sacred chapters would be written.
At stake was a ticket to the 1986 World Cup Semi-Finals and the additional tension generated by any geopolitical conflict; the Falklands spiced up the atmosphere in the Azteca Stadium on June the 22nd 1986.
¡La pillería!🕴⚽️
The roguery! 🕴⚽️
A 36 años de ‘La Mano de Dios’. pic.twitter.com/0Yi1ugKGXJ
— JS⚽️ (@juegosimple__) June 22, 2022
Una primera parte intrascendente, en la que lo más destacado fue la temprana cartulina amarilla a Terry Fenwick. No habría nada más que contar, salvo que la tensión en el aire era tan densa que podía cortarse con un cuchillo.
Todo lo que vendría en la segunda mitad es simplemente inolvidable, minutos que entronizarían la figura de Diego Armando Maradona como una deidad para la feligresía albiceleste; aquella tarde en durante la segunda parte ocurrieron dos cosas que nadie -incluso quienes no habían nacido aún- en el mundo del futbol podrían ignorar u olvidar; el D10S de la Argentina obró sus milagros, primero en un acto de pillería infernal, después, con una divina obra de arte que el mismísimo Leonardo Da Vinci habría deseado poder inmortalizar en algún fresco.
An inconsequential first half, the highlight of which was the early yellow card for Terry Fenwick. There was nothing more to tell, except that the tension in the air was so thick you could cut it with a knife.
Everything that would come in the second half is simply unforgettable, minutes that would enthrone the figure of Diego Armando Maradona as a deity for the Albiceleste faithful; that afternoon in the second half two things happened that no one - even those not yet born - in the world of football could ignore or forget; Argentina's D10S worked his miracles, first in an act of infernal mischief, then with a divine work of art that Leonardo Da Vinci himself would have wished he had been able to immortalise in a fresco.
Seis minutos de juego en aquella segunda mitad inolvidable, y Diego, mediante la pillería anotaba un gol que tendría con los años una metamorfosis, una revolución romantizada, un acto políticamente incorrecto cuya incorreción habría de diluirse para convertirse en la dulzura de un pueblo que en el balón buscaba su revancha. Diego encaró, siempre lo hacía y buscó al poeta del balón -Valdano aún le pegaba a la pelota, aún no escribía relatos dulces en torno a ella- cuyo deficiente control fue la ocasión perfecta para un mal rechace de Steve Hodge que Diego aprovecharía para firmar, ante Peter Shilton, la infamia más celebre de la historia, nacía “La Mano de Dios”.
Six minutes into the game in that unforgettable second half, and Diego, through trickery, scored a goal that would metamorphose over the years, a romanticised revolution, a politically incorrect act which would be diluted to become the sweetness for the people who sought their revenge in the ball. Diego charged forward, as he always did, and sought out the poet of the ball - Valdano was still kicking the ball, not yet writing sweet stories about it - whose poor control was the perfect occasion for a bad clearance by Steve Hodge that Diego would take advantage of to sign, in front of Peter Shilton, the most famous infamy in history, "La Mano de Dios" (The Hand of God) was born.
La obra de arte. 👨🎨⚽️
The work of art. 👨🎨⚽️
🔙 36 años del ‘Gol del Siglo’ de Maradona en el Mundial de México 86 #Argentina derrotó 2-1 a #Inglaterra en el Estadio Azteca con dos goles de Diego pic.twitter.com/F4JJIcIPqX
— Luis Omar Tapia (@LuisOmarTapia) June 22, 2022
Y tan solo 4 minutos después de la pillería, una obra de arte sin parangón. Diego recorrió 52 metros con la bola hechizada y pegadita a sus pies, 44 pasos para 12 toques al balón, en el camino quedaron varados ante “el Pelusa” 7 futbolistas ingleses: Peter Beardsley, Glenn Hoddle, Peter Reid, Kenny Sansom, Terry Butcher, Terry Fenwick y Peter Shilton. 114,580 almas presentes en el Estadio Azteca y una narración épica en el incomparable relato de Víctor Hugo Morales todo para el gol más bello que se recuerde en la historia de las Copas de Mundo:
“Ahí la tiene Maradona, lo marcan dos, pisa la pelota Maradona, arranca por la derecha el genio del fútbol mundial, deja al tercero y va a tocar para Burruchaga… ¡Siempre Maradona! ¡Genio! ¡Genio! Ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta… Gooooool… Gooooool… ¡Quiero llorar! ¡Dios Santo, viva el fútbol! ¡Golaaazooo! ¡Diegoooool! ¡Maradona! Es para llorar, perdónenme… Maradona, en una corrida memorable, en la jugada de todos los tiempos… Barrilete cósmico… ¿De qué planeta viniste para dejar en el camino a tanto inglés, para que el país sea un puño apretado gritando por Argentina? Argentina 2 – Inglaterra 0. Diegol, Diegol, Diego Armando Maradona… Gracias Dios, por el fútbol, por Maradona, por estas lágrimas, por este Argentina 2 – Inglaterra 0.”
2-0 que se vería recortado por un infructuoso tanto de Gary Lineker; el arbitro pitó el final y Diego Armando Maradona ascendía al Olimpo del que solamente él mismo supo descender porque así lo quiso, cuando “le cortaron las piernas”.
And just 4 minutes after the trickery, an unparalleled work of art. Diego covered 52 metres with the ball spellbound and glued to his feet, 44 steps for 12 touches of the ball, 7 English players were stranded in the way before "El Pelusa": Peter Beardsley, Glenn Hoddle, Peter Reid, Kenny Sansom, Terry Butcher, Terry Fenwick and Peter Shilton. 114,580 souls present in the Azteca Stadium and an epic narration by the incomparable Victor Hugo Morales, all for the most beautiful goal in the history of the World Cup:
"There's Maradona, two of them mark him, Maradona steps on the ball, the genius of world football starts on the right, leaves the third and goes to play for Burruchaga... Always Maradona! Genius! Genius! Ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta-ta... Goooooool... Goooooool... Goooooool... I want to cry! Good God, long live football! Golaaazooo! Diegoooool! Maradona! It is to cry, forgive me... Maradona, in a memorable run, in the play of all times... Cosmic kite... From which planet did you come to leave on the way so many Englishmen, so that the country is a clenched fist shouting for Argentina? Argentina 2 - England 0. Diegol, Diegol, Diego Armando Maradona... Thank you God, for football, for Maradona, for these tears, for this Argentina 2 - England 0".
2-0 which was cut short by an unsuccessful Gary Lineker goal; the referee blew the final whistle and Diego Armando Maradona ascended to the Olympus from which he himself was only able to descend because he wanted to, when "his legs were cut off".
La reedición de la Guerra de las Malvinas en el Estadio Azteca:
The Falklands War reenactment in the Azteca Stadium:
✍🏼: Paco Andújar ⚽